EL BOXEO LUCENSE PREMIA LA ALTRUISTA LABOR DE MIKI SÁNCHEZ EN EL BOXEO CON UN EXITOSO Y MULTITUDINARIO HOMENAJE EN EL PABELLÓN DANIEL CORDIDO

Al igual que en una anterior visita, Lugo me recibió con frío  y aguanieve, aunque la inestimable acogida del atentísimo anfitrión Miki Sánchez y la bienvenida – escenificada en esa universidad gastronómica del buen saber, y sabor, del Restaurante España – dispensada por personajes lucenses del ayer y hoy del boxeo, dio calidez a mi grata estancia en la Ciudad Amurallada.

A los postres, las almas mater de ese santuario lucense del buen xantar que son Hector y Francisco López, adelantaron su particular homenaje a Miki Sánchez sorprendiéndole con la emisión del combate disputado en mayo de 1991, entre el homenajeado y el otrora campeón de España y Europa Alfonso Redondo.

Ya por la tarde, y con el Pabellón Daniel Cordido completamente abarrotado de aficionados al boxeo, e inmediatamente después del combate de semifondo disputado por el local Adrián Molina y el coruñés Sito Simón, se inició el protocolo de homenaje a una leyenda viva del boxeo lucense como es Miki Sánchez, quien subió al ring donde recibió una placa conmemorativa del acto.

Micrófono en mano el propio homenajeado, Miki Sánchez, quiso compartir el afecto y los aplausos de los asistentes al acto con el grupo de románticos altruistas del boxeo que colaboraron con él durante su prolífica etapa como maestro de boxeadores, entre los que se cuenta el único boxeador lucense de la historia Alberto Piñeiro Louzao, El Piña, que conquistó el título de Campeón de España.

De ese modo, fue invitando a subir al cuadrilátero para que le acompañaran en ese emotivo momento, a sus inseparables José Ángel Jul, Avelino Rodriguez de Armas, Dositeo Rocamonde, Pablo Yanes, Roberto López – que no pudo asistir por compromiso ineludible – y Alfonso Mateo Colina, así como a los hermanos Hector y Francisco López, entre otros. Además, tuvo un recuerdo para los extintos Xan Pérez, David Márquez, y José Luis Cancela.

Resultados / Paso a recordar los resultados de la excelente y entretenida velada cuyo elenco arbitral estuvo formado por José Manuel Vilas, José Ángel Bravo Carrio, Alberto Meijide Ruibal y José Luis Touriño, ejerciendo como jefe de los servicios médicos el doctor Alfonso Mateo Cortina y actuando como supervisor de la competición el propio presidente de la federación Manuel Planas.

En el primer combate Cristian Ríos, de la Escuela Boxeo Atlántico Brabox 76 se hizo acreedor al triunfo de su parte, frente a David Fontán de la Escuela Carlos Padin de Caldas de Reis.

El novel boxeador local, Aitor López, tuvo el privilegió de recibir de manos de Miki Sánchez, el trofeo como ganador del combate frente al discípulo del Rebouras Team Diego Cao.

Gran combate, una de las destacadas lides de la tarde-noche boxística, el que protagonizaron dos juveniles competidores que forman parte del Cuadro de Honor nacional como Juan Felipe Quinbayo del Piña Team, y el avilesino Ares Lois. El alumno de Alberto Piñeiro hizo un examen pugilístico en el que logró un sobresaliente alto, aunque el campeón nacional del Gimnasio Toa obtuvo la matrícula de honor y se llevó el triunfo para Avilés.

A Hoover Giraldo le entregó el trofeo de ganador Paco López del Restaurante España, tras su contundente triunfo por abandono de Pablo Nuñez de la Escuela Padin.

Pablo Pedrosa, un discípulo de Piña laureado internacionalmente, no consiguió reverdecer otro laurel, pues la victoria se la adueñó el púgil de la Escuela Carlos Padín Branyel Suárez.

En el combate entre Cristian Razvan y Diego Crecente de la Escola Cachorro los jueces árbitros dictaminaron que el resultado fuese de combate nulo.

Andrés Domínguez de la Escuela Boxeo Atlántico Brabox 76, y Martín García Iglesias de la Escola Cachorro, registraron su trilogía boxística con otro gran combate, en el cual, ambos excelentes boxeadores optaron con sus cualidades boxísticas a llevarse el triunfo. En un sector del publico se planteó la duda de si el director de combate hizo, o no, cuenta por caída en el tercer asalto.

Adrián Molina, uno de los ídolos del boxeo lucense actual, le tocó enfrentarse con un buen boxeador como Alejandro Simón. Disputado combate que dispuso de intensos cambios de golpes, con fases de dominio alterno, durante el que supo obtener mayor puntuación en las cartulinas arbitrales el discípulo del triunvirato de técnicos del Brabox 76 de Coruña.

El colofón al multidinario y excelente evento boxístico promovido por el Team Piña Boxing Club correspondió escribirlo al decano boxístico Aarón González, en representación del The Thunder de Marín, y al valeroso Alex Andreu, como aspirante de la Escola Cachorro. En disputa el Cinturón Gallego del peso medio. El campeador en más de cien batallas sobre lonas nacionales, del The Thunder de Marín, contuvo el enconado inicio y los posteriores ataques de coraje emprendidos por el bravo guerrero de la Escola Cachorro, y retuvo su fajín blanquiazul de campeón autonómico.

El homenajeado Miki Sánchez con sus colaboradores y amigos del boxeo lucense. En sobreimpresión detalle de la placa conmemorativa del evento boxístico en su honor, organizado por Team Piña Boxing Club de Lugo.

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